Actualmente, se sabe poco o nada sobre estas víctimas, los niños y niñas hundidos en la orfandad. Surgen en nosotros preguntas como: ¿Quiénes son?, ¿Dónde están?, ¿Cómo sobrellevan el duelo y el dolor?, ¿Quién los atiende?, ¿Quién les repara el daño?, ¿Quién y qué las mantiene vivas?
¿Recuerdan a Ingrid Arizaga Bandín? Bueno, ella fue asesinada por su esposo Sandro Villegas Arévalo. Y los familiares que se encargaron de los 4 niños huérfanos, por esta tragedia, fueron sus abuelos: Rafael y Giorgina. Sin embargo, desde que Ingrid falleció, sus hijos nunca tuvieron una asistencia o soporte psicológico. Rafael mencionó: “No tendríamos que ser las víctimas quienes estemos buscando ayuda, tendría que ser el Estado el que nos dé todo el apoyo que necesitamos”.
Finalmente, el padre de Ingrid Arizaga, Don Rafael, lamentándose señaló: “Si mi hija lo hubiese denunciado quizás aún estaría viva”. Así que, es muy importante que se hagan las denuncias correspondientes. Puesto que, si no se realizan a tiempo podría ser demasiado tarde, como ocurrió con Ingrid.