Los participantes del foro «Mortalidad materna: desafío para el Estado dentro del marco de los derechos sexuales y reproductivos», concluyeron que la violencia contra la mujer es un factor de riesgo de mortalidad materna para las gestantes, la cual debe ser identificada y atendida a tiempo y de manera intersectorial.
Este evento fue organizado en Lima por el movimiento Manuela Ramos, quienes presentaron un estudio realizado en el departamento de Ayacucho, el cual manifiesta que 5 de 11 muertes maternas ocurridas en el 2012, registraron como antecedente el maltrato físico, sexual y psicológico durante el embarazo.
La coordinadora de Derechos Sexuales y Reproductivos de la Mujer del movimiento Manuela Ramos, Pilar Puente, señaló que esta información fue obtenida mediante las entrevistas hechas a los familiares de las víctimas, y no por los informes médicos.
El estudio denominado «Mortalidad materna: más allá de la mirada biomédica», se efectuó el año pasado y duró 4 meses, el cual recoge los 11 casos de muerte materna ocurridos en Ayacucho en el año 2012, cuya responsable de la investigación fue la obstetriz Haydee Orihuela Ríos, quien comentó que las mujeres que forman parte de estos casos procedían de Cangallo, Huanta, Huamanga y el VRAEM, las cuales tuvieron entre 18 y 35 años.
La investigación también revela que el aborto es causa de muerte materna, y que a pesar de que la tasa de mortalidad disminuyó a 93 por 100 mil nacidos vivos, según el último reporte del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), aún no se controla como debe.